9_ El cigarrillo. Maldito.

Comencé a fumar a mis 19 años.

Cuando mis amigos a los 13 ó 14 años empezaron a fumar, imaginando que con un cigarrillo en la mano podían aparentar ser mas grandes, mas maduros, mas cancheros.... yo pensaba que estaba mal, que se estaban haciendo daño.
A mis 19 años, cursaba Psicología en la universidad. En las aulas se podía fumar. Fumaban todos menos yo.
Entonces quise prenderme uno. Quería fumar como todos esos "pseudo intelectuales" que tenía a mi alrededor. También debo reconocer que además de esa demostración de poca personalidad de mi parte, me empujó al cigarrillo un momento personal de mi vida nefasto. Pero no quiero hablar de es, no viene al caso.

Cuestión; empecé a fumar.

Mi primer cigarrillo, fue un Parliament. No quería fumar lo que todos fumaban: Marlboro, Camel, Lucky Strikes o Philip Morris. Yo tenía que ser distinto.
Compré un atado de Parliament, tardé una barbaridad en abrir el paquete, saqué uno y lo prendí. Lo fumé.
Las primeras pitadas fueron una patada a mi estómago. Todo revuelto. Pensé que devolvía. La tos, que apareció inesperadamente ante la primer inhalación de humo, fue un vehemencial ataque a mi garganta, a mis pulmones. Mi interior había colapsado.
Pensé que era normal, ese sentimiento nauseabundo, al ser mi primera vez.
No importó, que esa noche tuviese nauseas, mareos y dolor de cabeza extremo. Seguí.
A la mañana siguiente, al otro día, a la tarde, a la noche, a la madrugada. Seguí.

Hubo días, después de tantos cigarrillos que mi garganta no podía mas. Estaba seca, árida. Entonces tomaba un café, un poco de agua, humedecía mi garganta, con el sólo fin de que el humo no la raspara tanto.
Muchas veces, he prendido un cigarrillo con el resto de cenizas encendidas que quedaban en el cigarrillo que estaba a punto de tirar.
A medida que mi vida era mas incierta, mas nefasta, mas oscura... mas fumaba. Era como querer suicidarse, sin tener los huevos como para comprar un arma y jalar del gatillo. Lentamente me estaba matando. Parecía que era lo que quería. Mi adicción era imposible de parar. Además yo no quería detenerla.

Mas de una vez, al sacarme la ropa a la noche, me dieron ganas de vomitar. Oler, en mis remeras, buzos... oler en mi piel el aroma repugnante a "cigarrillo", revolvía mis entrañas. Pero no importaba. Al otro día, a la mañana temprano, prendía otro. Envenenándome.

El primer cigarrillo de la mañana, habitualmente hacia detonar mi cuerpo: arcadas, mareos.... pero tampoco importaba. Pensaba: "fumo el primero así, después el cuerpo se acostumbra."

Aún recuerdo la cara de dolor y de decepción que puso mi vieja cuando me encontró fumando por la calle, por Lavalle y Florida (que chances había!!!!). Mi imagen con el cigarrillo, la lastimó tanto como una golpiza de holligans enfurecidos y ebrios.

Eso tampoco me detuvo. Seguí.

Seguí. Sigo aún. Con 32 años, sigo.

Ayer, pensé cuantos cigarrillos habré fumado en mi vida. Imaginando que fumé entre 25 ó 35 cigarrillos dependiendo un poco en mi estadio mental, es decir un promedio de 30 cigarrillos diarios (quizás exagerando), desde mis 19 hasta mis 32 años.... fumé: 142350 cigarrillos aproximadamente.

Luego de hacer ese cálculo, y leyendo en Internet acerca del tabaquismo.... encontré en YouTube, el siguiente vídeo:

http://www.youtube.com/watch?v=cDpXLxn9WTA

cómo estará mi cuerpo luego de 142350 cigarrillos?

Los medios, los médicos, la gente que me ama, me habla de los problemas que me acarrea el fumar. Pero sigo. Soy sordo, ciego y mudo ante los consejos de la buena gente.

Por qué? No lo se. Debo ser un egoísta de mierda, pensar que es el adjetivo o la característica de una persona que mas detesto, junto con la de mentiroso... Aunque hipócrita también soy. Miles de noches he arrojado atados enteros prometiéndome no fumar mas, para al otro día salir corriendo al kiosco a comprar el maldito veneno. Egoísta e hipócrita.

Por qué si se el serio daño que me estoy ocasionando, no dejo de fumar? Por qué? Por qué si pude salir de tantas mierdas que me planteo la vida, no puedo salir de esta porquería que es el fumar? No creas que es facil, estimado lector. NO lo creas.

Soy un adicto.

No me debo querer.

Me debo odiar. Debo odiar a quienes me rodean y digo que amo tanto. Soy un imbécil.

Pero se que no es así. Porque HOY no me odio, y no odio a las personas que amo. Sólo soy un pobre idiota que a los 32 años no encuentra el camino que debe costear para llegar a algún lado. Y mientras estoy perdido, tratando de encontrar ese camino, fumo. Pero no quiero fumar mas. No quiero.

Lo voy a dejar. Espero que no sea tarde.

Te voy a dejar.

no importa quien soy.

pd: tener ganas de contar mi historia con el cigarrillo, fue motivada por la lectura de un blog:

http://www.criticadigital.com/comodejardefumar/

No es que leer ese blog, hizo que me dieran ganas de de dejar de fumar. Sólo cambio mi idea acerca de lo que quería escribir. Hoy quise escribir sobre vos: cigarrillo de mierda.